viernes, 17 de noviembre de 2017

La del corazón roto

Creo que en la única forma que siento que me encuentro es con el corazón roto, es el unico momento donde me siento en mi esencia. Creo que no me percibo, y no me dejo ser de otra forma. va mucho mas allá de mi estado de animo, eso no importa, aunque reboce de felicidad siempre adentro mio hay una mujer con el corazón roto que pide salir.
recuerdo los primeros meses con ella, donde lloraba cada domingo cuando llegaba el momento de que se fuera. lloraba porque pensaba que mañana no volvería a verla. juego todas mis cartas a que eso pase, tarde o temprano, suelto las riendas y galopo contra el viento hasta que me caiga. y cuando eso pasa, pobre yo que me cai, que nadie estuvo para sujetarme, que nadie me aviso que no llevaba bien agarrada las riendas. me acuerdo ese amor pleno, que sentía que iba a perder, ese amor tan inmenso que se transformaba en miedo. y acá estoy, sin tanto miedo, porque ya no la tengo, porque ya la perdí. porque aunque sueñe su regreso, no va a volver, no va a volver la misma. y no me va a encontrar a mi, no a la que dejo, va a volver a encontrar a la del corazón roto, que anda por ahí buscando jirones para emparcharse nuevamente. creo que soy mas plena y mas autentica con el corazón roto, dando todo por perdido, con nada de saldo a su favor, sabiendo que todo es ajeno, y todo lo que va a venir es algo a favor.
creo que ahi esta mi adrenalina, como quien vaga por las calles, sin miedo a nada. como quien no tiene rumbo, ni casa, ni amores, ni lugar de pertenencia. siento que mi escencia es asi, y no se acomoda a no sentirse asi, a no ser asi. pero me habia acostumbrado, y no desde la mediocridad del lugar de confort, conocido y comodo. hablo de la linda costumbre, de la aceptacion, de la plenitud, de la tranquilidad que hoy, y tal vez mañana, todo siga en el sitio que lo deje. queria quedarme ahi, quizas lo decidi tarde, quizas cuando iba a aceptar mi nueva escencia, cuando todo iba de mejor a lo placentero, fue tarde.
pero me siento comoda con el corazon roto, nada me pesa, puedo vivir con lo que cabe en mis bolsillos, y nada importa, ni el pasado, ni el futuro, solo el presente efimero que se consume como el humo del cigarrillo. caer a lo profundo. me siento comoda en lo profundo